Las motivaciones por las que comenzamos a correr son variadas, incluso complejas. Unos dicen que correr les sirve como terapia para desconectar de la rutina. Otros lo utilizan de excusa con aquello de perder unos kgs de más y llevar una vida más sana.
Para la corredora que presentamos hoy, Alejandra Tarno, correr va mucho más allá que todo eso. Es un proceso mucho más interior. Correr se ha convertido en una terapia, un ejercicio mental que le ha ayudado para recuperarse de los ocho años más difíciles de su vida tras un infierno de abuso y maltrato. Menos mal que su “partner in crime”, Lou Reyna, le dio el running como una herramienta con la que respirar nuevamente.
Alejandra, o como la hemos bautizado, “lady lazo”, es madre de dos ratones, Eugenia y Alonso. Profesionalmente se dedica a investigar en proyectos de neurociencia aplicados al ámbito de la educación y del arte, compaginándolo con la redacción de su PhD en Neuroestética. Una auténtica superwoman.
Correr le ha ayudado a vencer muchas limitaciones, le ha proporcionado una nueva forma de concebir la salud y la forma en la que vive su día a día en general.
“El running me permite poner en práctica la propiocepción, el estar presente en el momento presente, en cada pisada y con cada respiración. Cuando corro, encuentro un lugar donde ser consciente de cómo está mi cuerpo, mi mente y mi alma”.
¿Recordamos nuestra primera carrera? En la mayoría de casos ha sido una de corta distancia y cerca de casa. Pero nuestra Alejandra se plantó en París a correr nada más y nada menos que un 10K en Disneyland. Todo un éxito ver como con cada zancada se acercaba a la meta en perfectas condiciones.
Nunca se había decidido a apuntarse a un club de running, pero fue ver los Mapoma Runners un día mientras patinaba y preguntarse, ¿por qué no? Tras hablar con los entrenadores, se sintió por fin comprendida en lo que despertaba en ella este deporte y no tuvo ninguna duda: había encontrado su sitio.
“Desde que pertenezco a esta gran familia, me siento en sintonía con el running. Esa sensación de que esté donde esté, ya no corro sola, porque siempre está mi familia runner apoyándome, inspirándome y haciéndome querer crecer cada día”.
Con Mapoma, ha aprendido que correr es toda una ciencia. Ha conocido ejercicios para mejorar y evitar lesiones, conceptos como el ritmo, la cadencia, la intensidad, los músculos y articulaciones… y no menos importante, los “recoverys”. A niveles de salud, ha remitido asombrosamente una osteopenia severa.
“Si quieres formar parte de un club de runners, Mapoma es el sitio. Cuenta con la mejor plantilla de entrenadores y profesionales del mundo del running. Además, existe una especie de hermandad donde todos se apoyan y nadie se queda atrás. Solo puedo tener agradecimiento para esta gran familia de runners que me inspira y enseña los secretos que entraña la magia del corredor”.
Solo ella podría hablar de admiración a los demás cuando es precisamente ella la que nos deja a los demás boquiabiertos cuando vemos todo lo que está progresando en tan poco tiempo. Sus próximos retos runners son las carreras de Disney en EEUU y los 10k de Jerusalén.
Su lema es “corre hoy por el adulto que quieres ser mañana”. Desde luego, todos nos volvemos niños cuando saca su chocolate justo al acabar el entreno para que no decaigan nuestros altos niveles de endorfinas. Corre compañera, no dejes de hacerlo, quieres pasar desapercibida pero es imposible permanecer impasible a tanto cariño y amor que desprendes hacia este deporte.
PD: podéis seguir las aventuras de Alejandra a través de su Instagram @alexistarno
QUIZ RÁPIDO DEL CORREDOR (esto o aquello)
CONOCIENDO A LOS MAPOMA RUNNERS